Me llevanto temprano moribundo, perezoso resucito, con noticias asesinas me tomo el desayuno, camino del trabajo, aburrido vigilo las caras de los viajeros, compañeros de la rutina y los sucesos...
Sus ojos sin duda son los tuyos...¿Cuánto tiemp ha pasado desde los primeros errores? la ciudad gritaba y maldecia nuestros nombres...dejando en los portales los ecos de tus susurros...agarrate de mi mano, que TENGO MIEDO DEL FUTURO...mirarte a los ojos y recordarte que antes de rendirnos fuimos eternos...
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